Me alejo ahora con mi canto,
no se cuando vuelva aquí,
pero el gusto de cantarles
ya esta noche me lo dí.
Al varón mi abrazo gaucho,
con canciones quise dar,
y un montón de cosas nuestras
que andando supe juntar.
Me voy, les dejo mi alma,
en cada verso fui yo;
mi guitarra irá floreando cada aplauso que llegó
y mi corazón guardando
cada aplauso que escuchó.
Si la mujer por ser bella
es la musa del cantor,
le estaba cantando a ellas
cuando hablaba del amor.
Si mi canto fue de ustedes
por ustedes quiero oír,
cantar mis coplas y entonces
mi alma se quedará aquí.