Te vi una tarde, paseando en la orilla,
tu pelo y el viento jugando hacia el sur,
y una lágrima tuya en el lago se quiso esconder;
luego una noche, viniste a escucharme cantar,
bella y sola, tu mirada triste, vagando extraviada
llegaste hasta el bar del hotel:
tu escuchabas sin ver, hasta que sin querer
cante el cielito aquel,
y otra lágrima vi y en la alfombra quedo.
Y yo cante por ti, tu lloraste por él,
nos juntamos los dos, a calmar tu dolor.
y yo cante por ti, tu no lloraste más,
mi corazón gozó, tu dolor terminó.
Y una noche y otra noche,
volviste a escucharme cantar y tu melancolía
sin que lo notaras, se iba alejando de ti.
ya no canté nunca más aquel cielito cruel,
mi canción te buscaba, abrazaba y cuidaba,
y también te pintaba algún rojo color.
y una sonrisa en tus labios por fin se formó
y todo el mundo rió,
la luna apareció y todo iluminó.
Y yo cante por ti, una canción de amor,
mi guitarra te habló, cuando se enamoró.
y junto al fuego fue, tu corazón se abrió
y brindamos los dos, nuestro amor empezó
Tengo una cita contigo el invierno que viene,
el tiempo no pasa, ya extraño la nieve,
y siento tu ausencia en el bar del hotel;
alguna noche soñando empiezo a cantar
el cielito, que un día nos llevo aquel beso,
muero de nostalgia por volverte a ver;
verdes tus ojos sin lagrimas, miran por mi,
solamente por mi,
todas las noches rondan el bar del hotel
y cantaré por ti esta canción de amor
el piano escuchará y me acompañará
y cantaré por ti esta canción de amor
brindaremos los dos, nuestro amor empezó.